Muy por debajo de la superficie de la tierra; sobre la orilla del Mar sin Estrellas; hay una gran cantidad de túneles y recintos llenos de historias. Las entradas que conducen a este santuario suelen estar ocultas; a veces en el suelo de los bosques; en ocasiones; en hogares privados e; incluso; pueden estar a simple vista. Pero quienes las buscan las encontrarán. Sus puertas han estado aguardándolos.
Zachary busca su puerta; aunque no lo sabe. Sigue un canto de sirenas silencioso; una certeza inexplicable de que está destinado a encontrar otro sitio. Cuando descubre un libro misterioso en las estanterías de la biblioteca del campus; empieza a leer y queda cautivado por los relatos de prisioneros que buscan amor; ciudades perdidas y acólitos sin nombre. De repente; una vuelta de página trae a Zachary a una historia de su propia niñez; increíblemente escrita en ese antiguo libro.
Una abeja; una llave y una espada impresas en el libro conducen a Zachary a dos personas que cambiarán el rumbo de su vida: Mirabel y Dorian. Estos desconocidos lo guían a través de bailes de máscaras y relatos susurrados en salones clandestinos hasta la sede de una sociedad secreta; donde los picaportes cuelgan de cintas y; finalmente; a través de una puerta pintada que se abre mágicamente para entrar en un lugar que siempre había anhelado. Entre túneles serpenteantes atestados de libros; salones de baile y orillas oscuras como el vino; Zachary cae en un mundo embriagador; impregnado de romanticismo y misterio. Pero una batalla se libra por el destino de ese lugar y; aunque hay quienes lo sacrificarían todo para protegerlo; otros están decididos a destruirlo.